Deberes de los contribuyentes y bienestar social del adulto mayor

Publicado por el

Blog Académico

En febrero de este año un hecho mediático ocurrido en Puerto Montt, producto de la no emisión de boletas, motivo un debate a nivel nacional con una interesante presencia en redes sociales. Debido a esto se conocieron situaciones similares acaecidas en otras ciudades, por lo que creo, hay que analizar las consecuencias de algo que parece ser intrascendente para algunos, pero no menos importante para la economía de nuestro país.

El hecho en sí tiene varias aristas importantes por analizar, pero nos ocuparemos de dos cuestiones fundamentales: 1) la no emisión del Documento Tributario Electrónico (boleta de venta) y 2) la elusión y evasión de impuestos, que este hecho conlleva. Este simple acto denota una falta de conocimiento de las normas de carácter tributario que, normalmente afecta a la población.

Un sistema tributario reconoce tres elementos fundamentales: El estado como sujeto activo que desde su fundación tiene la potestad de exigir el pago de tributos, el sujeto pasivo, o sea los contribuyentes que estamos obligados a pagar los impuestos y, la obligación tributaria, que corresponde al compromiso del sujeto pasivo de entregar una cantidad de dinero (tributo) exigida por el sujeto activo (estado).

Recientemente, el Estado ha dado inicio al cumplimiento de un anhelado sueño de la población mayor que apunta al mejoramiento de sus pensiones. Esto requiere el desembolso de grandes cantidades de dinero de manera permanente que, previamente, el Estado debe recolectar también de forma permanente. La principal fuente de recolección de fondos es a través de los tributos, por eso, cada uno de nosotros tenemos el deber de pagar nuestros impuestos y cumplir con el mandato de la ley de exigir la boleta, a su vez, el comerciante tiene la obligación de emitirla. No ejercer estos derechos y obligaciones implica una violación de la ley y configuran un delito de carácter tributario.

Como consumidores, no debemos normalizar este tipo de hechos. Tenemos que actuar con firmeza y demostrar que efectivamente nos preocupa el bienestar del adulto mayor y, en este sentido, el impuesto que pagamos en cada contribuirá a esto.

El equivalente al 19% de lo que se paga por cualquier operación de compra, es impuesto que va a la caja fiscal y contribuye a esta finalidad. Como ciudadanos, debemos apelar a nuestra personal solidaridad. Por eso, lo acontecido en Puerto Montt, no debe seguir ocurriendo. Cuando usted exigimos la boleta, se está garantizando esta pensión universal y una mejor calidad de vida para aquellos que se vean beneficiados.